Leyenda del Mes

LA DAMA TAPADA

La Dama Tapada es un personaje de la creencia popular ecuatoriana, específicamente en Guayaquil.  La tradición cuenta que este caso sucedió cerca del año 1700 y varias personas resultaron muertas a causa de esta misteriosa mujer. 

Cuenta la leyenda que la dama tapada se aparecía en horas cercanas a la media noche a personas que frecuentaban callejones no muy concurridos. Su hermosura y perfume era impresionantes lo cual hacía que todos quienes la vieran quedaran impactados. Mediante señales hacía que sus víctimas la sigan pero no lo suficiente como para alcanzarla.

Sus víctimas eran hombres galanteadores que se sentían casi hipnotizados a seguir y a dirigirle un piropo a esta dama.  Se sentían impulsados por la curiosidad de acercarse a esta mujer que tanto los cautivaba y que solo era visible para quienes la seguían.

Según la Sra. María Larreategui de 85 años “la dama tapada era una joven muy hermosa con vestidos de seda o almidonados y su llevaba su rostro tapado con un velo para que no la reconozcan, tenía una fragancia muy agradable de olor a lavanda”.

Luego de capturar la atención total del que se le había pasado por su camino lo alejaba del centro urbano y en lugares remotos se detenía. Cuando su víctima se acercaba para descubrirle el rostro se sorprendía al ver que esa gran belleza se convertía en una imagen calavérica con ojos que parecían bolas de fuego y rodeada de un olor nauseabundo.

Sus víctimas morían algunas por susto y otras por la pestilente fragancia que emanaba el espectro. Muy pocos sobrevivían y quienes lo hacían quedaban locos. En la cultura popular estas personas eran llamadas “tunantes”

Según el sitio web cometa.com.ec la misteriosa mujer solo atacaba a mujeriegos y se los llevaba al cementerio general y decía: Ya me ve usted ahora como soy... si usted quiere, sígame.

Pero en Guayaquil no es el único lugar donde se ha visto a la tapada. Pedro Jiménez cuenta que en la ciudad de Lambayeque en Perú hay un relato similar a este. Jiménez dice que según la tradición peruana esta es una mujer de avanzada edad y aparentemente viuda puesto que solo anda vestida de negro.

Es tanta la fama de esta leyenda que en Guayaquil se realizó una obra de teatro con el fin de rendirle cierto homenaje en el año 2007. Esta obra adaptación fue realizada por alumnos del Centro Espíritu Santo como parte del Concurso Intercolegial de Teatro Educando a Guayaquil.